Consejos de rutina diaria para la cuarentena (COVID-19)

Ahora mismo estamos pasando por una situación complicada, atípica, de miedo, ansiedad, angustia y preocupación por nuestra salud, la de nuestros seres queridos, y también por la de la población general. El decreto del estado de alarma con el aislamiento en domicilio se ha visto que es una de las medidas más eficaces para luchar contra la pandemia del coronavirus - COVID-!9, ya que de forma preventiva evita un contagio desproporcionado y exponencial entre la población.

Al igual que es una medida necesaria y beneficiosa para nuestra salud, también es una medida "dura" ya que tendrá consecuencias sobre nuestro estado físico y psicológico, no solo de forma individual sino también colectivamente.

Por este motivo, desde nuestra clínica Zero 42 continuamos pensando en vuestro bienestar, y por ello hemos elaborado una serie de recomendaciones que os ayudarán a mantener una rutina diaria, ayudándoos a sobrellevar esta situación de confinamiento en vuestros hogares.

¿Cuáles son estas recomendaciones?

  1. ¡Comprender la realidad! Es imprescindible  que colaboremos todos a frenar el contagio permaneciendo en casa como aconsejan las autoridades sanitarias. No debemos pensar únicamente en nosotros mismos, sino pensar en el bien común, por ello practiquemos la SOLIDARIDAD y quedémonos en casa.
  2. ¡Vamos a hacer lo correcto! Cada uno tiene que ser responsable de sus actos y respetar las MEDIDAS impuestas, entre ellas, mantener la distancia mínima de seguridad de 1 m cuando tengamos que salir a la calle; utilizar mascarillas y guantes cuando sea necesario, higiene de manos, etc.
  3. ¡Evitar la sobreinformación! Infórmate de lo necesario. Para ello puedes elegir el medio de comunicación que te parezca más fiable (cadenas de TV, páginas web oficiales como la del Ministerio de Sanidad, etc) y consultar sólo en determinados momentos del día. ¿Por qué aconsejamos esto? porque demasiada información durante horas muy prolongadas del día puede ser perjudicial.
  4. ¡Evitar comprar en exceso! No sabemos hasta cuándo vamos a permanecer en esta situación,, y por eso debemos evitar comprar en exceso determinado tipo de productos. Por ejemplo, la carne y el pescado deben consumirse preferiblemente frescos, el comprar una cantidad demasiado grande, nos obligará a congelarlo y si existe algún problema por un mal congelamiento, podrá acabar siendo un desperdicio en el futuro. Otro ejemplo, el comprar en exceso papel higiénico hará que si todos actuamos de esa forma compulsiva, descontrolada resulte en una actitud egoísta y privar de un bien como este a otras personas. ¿El resultado? El egoísmo y la insolidaridad para con los demás, que es precisamente lo que no nos podemos permitir en este momento. Por lo tanto, sé responsable a la hora de hacer la compra, y compra sólo lo estrictamente necesario, aquello que sepamos que vamos a consumir y así evitar tirar productos. Nuestros pacientes de protocolo de pérdida de peso, en este sentido lo tienen un poco más fácil, ya que con cada una de sus dietas se adjunta una lista de la compra que por una parte, les ahorrará tiempo en confeccionar dicha lista y por otra parte, les ayudará a organizar su planning de ingestas semanal.
  5. ¡Mantener el ritmo circadiano! Es importante intentar mantener la misma rutina de antes e incluso mejorarla. Por ejemplo, elaborar un planning diario de actividades nos ayudará a evitar por un lado el aburrimiento, y por otra parte, evitar situaciones de ansiedad, estados depresivos, etc. Por ejemplo, es conveniente intentar levantarnos y acostarnos todos los días a la misma hora, aprovechar al máximo las horas de luz, lo cual de forma concomitante nos ayudará a absorber esa parte de luz que intervendrá en la síntesis de vitamina D, intentar hacer las comidas a la misma hora, hacer una lista de varias actividades diarias de no demasiada duración cada una de ellas, para así dinamizar el día, etc.
  6. ¡Mantener el contacto! Estar en contacto con personas, principalmente con las que más quieres, utilizando los medios de comunicación de los que disponemos hoy en día, nos ayuda a tener menos sensación de aislamiento, de soledad. Podrás hacerlo mediante llamada telefónica, Whattsap, videollamada, las redes sociales.
  7. ¡Planifica bien tu nueva situación! Saber intentar llevar un estilo de vida lo más parecido a lo normal nos ayuda.

No olvidéis moveros en casa. Es conveniente que evitéis el sedentarismo. Nos ayudará levantarnos del sillón cada cierto tiempo, practicar ejercicio diariamente (principalmente de tonificación), si disponéis de tablas de ejercicios que ya realizabas  en tu gimnasio habitual perfecto, sino existen plataformas en Internet en las que se aconsejan qué tipo de ejercicios realizar y cómo realizarlos.

Tiempo para la creatividad. Es un buen momento para intentar aprender una nueva manualidad o realizar alguna actividad que antes de toda esta situación no podías realizar por falta de tiempo o por dejadez. Por ejemplo, pintar, leer ese libro que empezaste en su día pero que no habías podido avanzar en la lectura y terminarlo, escuchar música, jugar más con tus hijos, hablar con tu pareja, ordenar tu armario, tareas de bricolaje, limpieza diaria del hogar, etc... todo ello ayudará a que tengas una sensación de orden y una sensación de tiempo ocupado, evitando así una sensación de encierro, de impotencia, de inutilidad...

Intentar buscar luz natural. Si dispones de una terraza sería lo ideal, en caso contrario, con estar cerca de una ventana a través de la cual entre la luz será suficiente, aportándonos el beneficio de la vitamina D.

Cuidar tu estado de ánimo. Al tener que pasar 24 horas en casa con más convivientes la comunicación es muy importante, debiendo ser tolerante, usar un tono de voz suave, ser optimista, practicar el diálogo, evitar discusiones, intercambiar opiniones, etc.

Vigilar o cuidar de la salud de los que viven contigo.

Presta atención a lo que COMES ¡YA NO HAY PRISA! Es una buena oportunidad para prestar la debida atención a nuestra alimentación. Debemos intentar una alimentación lo más saludable posible. Es una situación complicada la que estamos viviendo, en la que el pasar 24 horas en casa sin poder salir, genera en muchos de nosotros cierta ansiedad, que en algunos casos se mitigará con el "picoteo" continuo, el consumo en exceso de hidratos de carbono simples (bollería industrial, productos ultraprocesados, etc.), de grasas saturadas... lo cual tendrá como resultado una alimentación poco saludable además de un aumento de peso.

En nuestro siguiente post nos centraremos en pautas para mantener una alimentación saludable. Estad atentos!!!

Mucho ánimo porque de esta situación saldremos pronto y más reforzados que nunca ¡Mientras tanto... QUÉDATE EN CASA!