Tips nutricionales para ayudar en el tratamiento contra el cáncer

Hoy es el día mundial contra el Cáncer y desde Zero42 queremos no sólo reivindicar la importancia de la prevención precoz de esta enfermedad, sino también aportar nuestro granito de arena para ayudar a aquellas personas que lo padecen.

Las personas con cáncer deben mantener un peso corporal  saludable y consumir alimentos nutritivos. A veces, los efectos secundarios del tratamiento contra el cáncer pueden generar menos apetito y pérdida de peso en una persona. La pérdida de peso sin quererlo pude causar debilidad y malnutrición. Por otra banda, algunos tratamientos contra el cáncer pueden causar aumento de peso.

Hoy os traemos unos tips de alimentación de la manos de nuestra nutricionista, Luiza Miranda, para ayudar a personas con cáncer a mantener una alimentación saludable y favorable para su cuerpo.

  • Intenta mantener un peso saludable, obteniendo siempre nutrientes esenciales: proteínas, grasas y carbohidratos.
  • Se lo más activo posible. Hay que intentar, siempre que sea posible, moverse. Haz una caminata diaria o busca actividades para hacer de forma periódica. En caso de que no sea posible hacer ejercicio, busca actividades para hacer en casa, ya que permanecer sentado durante mucho tiempo o dormir demasiado puede hacer que pierdas masa muscular y aumentes la grasa corporal, incluso si no aumentas de peso.
  • Hidrátate bien. Si no te gusta el sabor del agua, toma más líquido a través de alimentos y otras bebidas. La sopa, la sandía, el té o la leche pueden ser buenas opciones. Otra opción es saborizar el agua con un poco de jugo de fruta.
  • Agrega sabor a la comida. Muchas veces el tratamiento puede llegar a afectar al paladar y los alimentos pueden llegar a resultar insípidos. Intenta condimentarlos con especias sabrosas, tanto como te guste (y te lo permitan). Prueba a usar ajo, pimienta negra, tomillo, romero o limón, entre otros.
  • Si no consigues hacer las tres comidas abundantes (desayuno, comida y cena), puedes intentar hacer 6 ingestas pequeñas durante el día. Lo importante es que asegures alcanzar tu objetivo calórico diario.
  • Si la carne no te gusta o te hace daño, puedes buscar otras fuentes de proteína, como pueden ser los pescados, los huevos, el queso, los frijoles, los frutos secos (y sus mantequillas), el tofu o licuados proteicos.
  • Intenta solucionar el sabor metálico en la boca. Lo ideal es que antes de comer quites ese sabor, ya que probablemente eso afectará a tu paladar y a posteriori a tu ingesta. Lo primero que puedes hacer es cepillarte los dientes o enjuagarte la boca antes de las comidas. Consumir algunos cítricos frescos también es una buena opción. Otro consejo es utilizar utensilios y ollas que no sean de metal, como por ejemplo de madera, de esta forma evitarás aumentar ese sabor.
  • Triturar las verduras y las carnes en una licuadora o una procesadora de alimentos puede ser de gran utilidad en caso de que tengas llagas bucales o infección de encías. Jugos y batidos también pueden ayudar a aliviar una llaga.
  • En los casos en los que haya que aumentar las calorías diarias para evitar la malnutrición, enriquece las comidas. Agrega queso, huevo, frutos secos, salsas suaves, jugo de carne o crema a la comida. Esto puede ayudar a suplir el déficit nutricional.
  • Consume alimentos completamente cocidos. No comas huevos que no estén cocidos hasta un punto sólido, ni pescado, ostras o mariscos crudos.
  • No comas ni bebas alimentos sin pasteurizar.